Déjalo ser, a menos que te hunda.

Deja que permanezca. Deja que sea quien quiera ser. Puedes permitir que nazca, que muera, que respire, que sea. A menos, que cada aire que exhale te esté robando de tu propio oxígeno. A menos, que cada vez que hable te esté haciendo sentir cada vez menos importante. A menos, que cada vez que sea no te deje ser a ti. Déjalo ser, a no ser que eso te haga ser menos.

lunes, 8 de agosto de 2011

Borrando con típex..

¿Cuántas veces habré escrito tu nombre en mis brazos? ¿En mis manos, en mi mesa, en mis cuadernos? ¿Cuántas veces se habrá repetido tu nombre a base de tinta en mi agenda, o a base de sangre en mis venas? ¿Cuántas veces he tecleado tu nombre seguido de historias que nunca se hicieron realidad? ¿Cuántas veces soñé con poder susurrarte tu nombre al oído tras un tequiero? Dime, ¿lo sabes? Yo tampoco. Fueron incontables veces, y todas ellas con permanente. Y ahora me ves borrando con típex tu nombre, de todos lados, porque nada se hizo realidad.. Pero lo escrito con permanente nunca se borra, sólo se disimula.. Recuérdalo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario